21 REVISTA Vivimos tiempos inciertos. En lo personal, cada uno de nosotros y nosotras enfrentamos reglas de vida nueva para un tablero donde nunca antes una pandemia había entrado en nues-tros planes. Y hemos tenido que reorganizar y repensar nuestro día a día. En lo profesional, con suerte también habremos tenido que tirar a la basura (casi) nuestras previsiones para este año y formular unos objetivos nuevos, un nuevo plan, un nuevo giro. Y digo con suerte con la intención de reivindicar aquello que ya es de sobra conocido: lo que no se mueve, pe-rece, se marchita, se adormece. Y ha tenido que llegar una pandemia para ponernos a prueba, para sacar nuestra resiliencia, nuestro empuje. Aquello que nos gusta llamar liderazgo. Porque, ¿qué es el liderazgo para un CEO en el momento actual? Es la capacidad de influencia, sí, pero también es la responsabilidad de dotar a todos y cada uno de los colaboradores de la responsabilidad de su auto-liderazgo, lide-rando con empatía, quizá más que nunca, con transparencia, asertividad y humanidad. Todos nos merecemos líderes más humanos, y todo apunta a que el líder más humano ha llegado para quedarse, siendo necesario para las nue-vas generaciones y para las actuales. En uno de los últimos informes de la consultora McKinsey titulado “From a room called fear to a room ca-lled hope: A leadership agenda for troubled time”, nos habla certeramente de que cuando las personas creemos que un líder se preocupa por nuestro bienestar, compromiso y éxito, nos ayuda a pasar de un espacio de miedo a esa sala llamada esperanza. Los líderes hábiles demuestran que se preocupan expresando compasión por el daño y la angustia emocional infligida por la crisis en cuestión, y las acciones que ellos y su organización toman en respuesta. Reconocen que las noticias son malas y que pueden empeorar antes de mejorar. Y están presentes física y emocionalmente. Siguiendo en la misma línea, las personas están más dis-puestas a aceptar e implementar decisiones complicadas o difíciles cuando creen que sus líderes se preocupan por ellos y están tratando de hacer lo mejor para el bien común en lugar de solo ellos mismos. Incluso cuando esta de-cisión basada en el bien común no satisfaga directamente sus objetivos. El COVID-19 nos ha traído grandes lecciones de vida donde no sabemos si saldremos mejores, aún. Pero lo que sí sabemos es que ya todos y todas somos diferentes. Por eso, es necesario que cada persona de la organización tome la posición que ocupa y desde ese auto lideraz-go, expanda plenamente su capacidad, defina Francesc Noguera CEO Banco Sabadell / México Es necesario que cada persona de la organización tome la posición que ocupa y desde ese auto liderazgo, expanda plenamente su capacidad, defina objetivos, trace la ruta a seguir, y reme en la misma dirección