27 REVISTA realizando un programa de Inteligencia Positiva, que me está ayudando a conocer mejor a mis “saboteadores” internos, a utilizar la perspectiva del “sabio” interno para fortalecer las emocio-nes positivas y, principalmente, a tener más empatía conmigo misma. Precisamente, refiriéndonos a la empatía, esta competencia clave de la inteligencia emocio-nal es muy importante en todas las facetas de nuestra vida pues nos permite colocarnos en el sitio del otro, entender sus reacciones y escu-char de forma activa, sin juzgar. En un líder, esta aptitud es fundamental para generar espacios psicológica y emocionalmente seguros, donde se fomente la creatividad y la conexión a través de un propósito común. Algunos libros que me han llevado a profundizar sobre el poder de la empatía y lo que significa su presencia (o au-sencia) son: “Far from the Tree” y “Wired to Care”. En 2017, inspiradas en el libro “Give and Take”, mis colegas de Recursos Humanos me acom-pañaron a crear una experiencia en la que tra-bajamos en la empatía como competencia clave para el éxito de nuestra área. Decidimos que el trabajo debía ser vivencial y -con el apoyo de Make-A-Wish- implementamos un programa donde todas las personas del equipo fuimos entrenadas para convertirnos en “hadas” y “ge-nios”. Nuestra misión era entender y realizar los sueños de niños que estaban enfrentando enfermedades que ponían su vida en riesgo. El proceso de descubrir el sueño de los niños, entendiendo profundamente lo que ellos de-seaban, sin proyectar nuestros deseos ni los de la familia, es un proceso que nos enseñó realmente lo que la empatía significa y nos llevó totalmente fuera de nuestra zona de confort. La experiencia fue transformadora en muchos niveles. El proceso de conexión con nuestra realidad en el trabajo fue desafiante por la in-tensidad de la experiencia, y generó resultados bastante positivos en todas nuestras métricas de clima laboral. La empatía nos impulsa a ser agentes de cam-bio. En Citi tenemos muchos ejemplos de líderes que utilizan su propia plataforma para fomentar transiciones en la sociedad, con convicciones claras y postura firme. Un ejemplo que me enor-gulleció muchísimo fueron las declaraciones de nuestro CFO, Mark Mason, luego de la muerte de George Floyd en Minneapolis. En el ambiente de trabajo, el racismo es un factor que inutiliza talentos y eso, para el crecimiento humano, profesional y económico, resulta una barrera preocupante. Es importante mantener un diá-logo constate sobre la riqueza que generan los orígenes diversos y asumir una posición acti-vamente antirracista para fomentar cambios. Otro ejemplo, impulsado por nuestra Presidenta Jane Fraser, fue la educación y concientización a todos nuestros colaboradores sobre los sesgos inconscientes por la Dra. Mahzarin R. Banaji. La Dra. Banaji nos ayudó a reconocer la prevalencia de los prejuicios no conscientes y su impacto en la generación de grandes y pequeñas inequi-dades. Reconocer que todos los tenemos es la base para poder trabajarlos y evitar que guíen nuestras decisiones. Inspirada en estos ejemplos y utilizando nues-tros valores corporativos como cimientos, tra-bajo para crear conciencia interna y externa-mente sobre el valor de tener ambientes cada vez más diversos e inclusivos, donde cada uno pueda ser la mejor versión de sí mismo. Este es el privilegio que me da el nuevo liderazgo. Es importante mantener un diálogo constante sobre la riqueza que generan los orígenes diversos y asumir una posición activamente antirracista para fomentar cambios